El presidente Alberto Fernández, analiza un nuevo cambio de gabinete que le permita completar el movimiento de reagrupamiento que realizó con el ingreso de Victoria Tolosa Paz y Kelly Olmos al gobierno. Según trascendió, lanzado a la búsqueda de su reelección ahora evalúa integrar una fórmula con Daniel Scioli y para eso analiza unificar las carteras de Ambiente y Turismo y regresarlo al gabinete.

Tras su corta estadía en Producción, que lo obligó a renunciar a la Embajada en Brasil para apenas una semana después volver a esa delegación diplomática, Daniel Scioli es el principal interés del mandatario, pues buscará reeditar así un eje político que el entendimiento de Segio Massa y Cristina kirchner desarticuló.

Sin embargo, en el entorno del actual embajador de Brasil tomaron distancia de la movida. "Nada que ver, Daniel está abocado a la gestión", le manifestaron a LPO.

Pensando en no quedarse fuera de la movida en el 2023, Alberto Fernández evalúa regresar a Santiago Cafiero a la jefatura de Gabinete, lo que le permitiría trasladar al actual embajador en Estados Unidos, Jorge Argüello, a la Cancillería.

Dichos cambios obligarían a un regreso de Jorge Manzur a Tucumán, donde recuperaría su cargo de gobernador, para luego postularse como vice de Osvaldo Jaldo. 

Ahora bien, si se concreta el rumor de la posible reelección de Alberto Fernández, se asume que Cafiero estaría de regreso en la Jefatura de Gabinete, ya que es su hombre de mayor confianza y su jefe de campaña. 

Cabe mencionar que el presidente empezó a revelarse luego de casi dos meses golpeado por la centralidad que ganó Massa al asumir en Economía, con  el ingreso de Olmos y Tolosa Paz, que decidió sin consultar a sus socios del Frente de Todos. 

Aunque el golpe más fuerte fue en el cierre del coloquio de IDEA, al que se hizo invitar. Su discurso encadenó tres frases lacerantes para el kirchnerismo que decidió declararle la guerra en todos los frentes, según confirmó a LPO un dirigente importante del oficialismo.

Las palabras que en el entorno de la vicepresidenta no dejaron pasar fueron la alusión a casos de corrupción con la obra pública durante la gestión de Cristina, la "prepotencia de los soberbios" que fue leída como una crítica a La Cámpora y la autoreferencia que es él en soledad quien está "arreglando" los problemas del país.

"Se olvida que en el momento que menciona supuesta corrupción en la obra pública, él era el jefe de Gabinete", afirmó una fuente del kirchnerismo a LPO, que entre otras cosas, recordó el sonoro escándalo de esa época vinculado a la Superintendencia de Seguros que manejaba su entonces mano derecha, Claudio Moroni.

Como sea, la situación llegó a tal nivel de tensión que en el kirchnerismo ahora ubican a Alberto prácticamente fuera del espacio. "Los que construyeron al Frente de Todos, Cristina, Massa y los gobernadores peronistas, siguen juntos", fue la frase a LPO de un dirigente de la vicepresidenta.

La mención a la alianza con Massa, que este sábado ensayó ante la élite de las finanzas globales un discurso de tono presidencial, no parece casual, pues para el albertismo es central para su proyecto reeleccionario dinamitar la actual alianza entre Cristina y Massa.

Ahora el interrogante interrogante es qué harán los gobernadores peronistas. El dato nuevo es que este martes, el kirchnerista Gerardo Zamora invitó a Massa a la cumbre que tendrá con sus pares del norte grande en Santiago del Estero.