Un nuevo inconveniente aparece en el horizonte del peronismo en el año electoral, esta vez en la Cámara de Senadores de la Nación. Cuatro miembros del interbloque del Frente de Todos rompieron con el espacio y conformaron uno nuevo llamado Unidad Federal.

El problema que esto conlleva al oficialismo es que se quedará sin la mayoría propia en la Cámara Alta Nacional, que se había conseguido con el acuerdo efectuado con partidos provinciales.

Quienes rompieron con el bloque oficialista son: Edgardo Kueider (Entre Ríos), Carlos Espínola (Corrientes), Guillermo Snopek (Jujuy), María Eugenia Cataflamo (San Luís) y Alejandra Vigo (Córdoba). Los dos primeros integraban el bloque llamado Frente Nacional y Popular, vinculado al PJ y los otros pertenecen a Unidad Ciudadana, el sello de Cristina Kirchner.

La cordobesa fue la figura clave para desatar esta ruptura. Quien será vice del bloque Unidad Federal, es la esposa del gobernador Juan Schiaretti, y en el discurso para oficializar el nuevo espacio, redactaron un comunicado con palabras bastantes similares a quien mostró sus intenciones presidenciales: "Buscamos ser una alternativa desde donde se priorice la posibilidad de aportar a la reflexión sobre la Argentina que queremos para nosotros y las futuras generaciones, sin grietas".

De esta manera, el peronismo tendrá 31 senadores: 19 del Frente Nacional y Popular y 12 de Unidad Ciudadana (bancadas creadas para lograr un lugar más en el Consejo de la Magistratura), además de sus tres aliados habituales: el rionegrino Alberto Weretilneck, la misionera Magdalena Solari Quintana y la riojana Clara Vega. Mientras que Juntos por el Cambio mantiene a sus 33 miembros.

El Presidente del bloque Unidad Federal será el jujeño Guillermo Snopek. Él fue el único que asistió a la reunión programada por José Mayans (presidente del bloque kirchnerista) y allí terminó de definir su ruptura. Aun así, Snopek no oculta su cercanía política con la Vicepresidenta, lo que podría resultar favorable para el Frente de Todos a la hora de sentarse a negociar.

El quiebre en el Senado fue motorizado no solamente por Juan Schiaretti. También participó el puntano Alberto Rodríguez Saa, quien debe mostrarse lo más lejos posible de Cristina Fernández de Kirchner si quiere aspirar a la reelección en San Luís.

El mandatario puntano cerró filas con Schiaretti, quien mostró sus pretensiones presidenciales, y como parte del acuerdo se propusieron romper el bloque del Frente de Todos del Senado. Una idea que ya insinuaron el año pasado, pero fracasó.

Parte de la ruptura se da también en descontento hacia la gestión presidencial de Alberto Fernández. Quien manifestó su disconformidad fue justamente el presidente del nuevo bloque, Guillermo Snopek, quien le escribió una carta a Cristina y manifestó que uno de los motivos de la ruptura fue "la distancia cada vez mayor que siento respecto al rumbo de gestión del presidente de la Nación, Alberto Fernández, alejado —a mi humilde entender— de las prioridades que nuestro pueblo demanda".