Con el batacazo que dio Javier Milei en las PASO y con la reconfiguración del tablero electoral, la vicepresidenta Cristina Kirchner volví a la Ciudad de Buenos Aires mantuvo sus primeras reuniones políticas.

Cristina retornó a CABA, luego de votar en Santa Cruz, donde votó el domingo y el kirchnerismo vio finalizada su hegemonía en esa provincia tras el triunfo del sindicalista Claudio Vidal.

Por estas horas, trascendió que la Vicepresidenta el lunes recibió en su oficina del Senado de la Nación al ministro del Interior y jefe de campaña de Unión por la Patria, Eduardo “Wado” de Pedro.

Si bien no se filtró mucha información, se supo que Cristina y Wado analizaron cuestiones sobre cómo encarar la campaña para las elecciones “de verdad” en octubre, que definirán si habrá un candidato presidencial ganador en primera vuelta o un balotaje para noviembre.

Así mismo, los primeros trazos de indican que la Provincia de Buenos Aires adquirió más relevancia para Unión por la Patria. La idea es “blindar” a Axel Kicillof, sobre todo, ante cualquier eventualidad que surja a nivel nacional.

En ese marco, aún se desconoce si Cristina Kirchner seguirá sin implicarse demasiado en la campaña oficialista como pasó hasta ahora, o si bien jugará un rol más importante, como le piden algunos dirigentes cercanos, para logar que Sergio Massa ingrese al balotaje.

Por otro lado, el comando de campaña de Unión por la Patria, montado en la calle Bartolomé Mitre, cerca de la Casa Rosada, estuvo cerrado en estos días luego de las PASO, pero se reabrirá nuevamente en breve con la mira puesta en octubre.

El objetivo del oficialismo es ingresar a la segunda vuelta superando a Patricia Bullrich, para así definir en noviembre la presidencia con Milei, contra quien consideran que tienen más chances de ganarle y continuar en la Rosada durante los próximos cuatro años.