Frente a las elecciones generales de octubre, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, recibió en su despacho al cosecretario General de la CGT y secretario Adjunto de Camioneros, Pablo Moyano. Ambos afianzaron la campaña y pusieron en común sus propuestas.

En el encuentro tuvo lugar un análisis de “la realidad del país, la situación política y económica”, y como punto fundamental destacaron su “apoyo incondicional” a la fórmula de Unión por la Patria compuesta por Sergio Massa y Agustín Rossi, según trascendió en los medios.

Junto a más miembros de la comisión directiva del Sindicato, el camionero señaló que el peronismo “debe movilizarse” para ganar tener un triunfo en octubre y descartar una posible “catástrofe nacional”.

Por su parte, Kicillof envió un mensaje al gremio de Pablo Moyano: destacó que es un momento “determinante” y la historia pone en juego dos caminos. Disparó: “Hay que elegir entre mantener los derechos o dinamitar”.

“Hay solo dos caminos y es un tiempo bisagra. No se puede aceptar la doctrina de la dinamita, la motosierra, la dolarización, la quita de derechos. Ya dolarizaron en los noventa con la convertibilidad, cuando cada peso que circulaba valía un dólar”, agregó el gobernador.

Además, apuntó contra la oposición, a quienes acusó de “vestirse como novedosos, hacer shows y espectáculos”, pero describió que “son los mismos que quieren privatizar, bajar salarios y ajustar”.

“Es preciso defender más que nunca al movimiento obrero, a las organizaciones sindicales y a las obras sociales que atienden a millones de trabajadores”, sentenció Kicillof.