De cara a la asunción de Javier Milei como presidente el próximo 10 de diciembre, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, mantuvo un encuentro junto a intendentes peronistas del territorio bonaerense, de tal modo de definir el rumbo del espacio provincial que funcionará como máxima oposición del gobierno nacional.

El encuentro tuvo lugar en Gobernación de la ciudad de La Plata, donde llegaron los alcaldes para debatir sobre el plan de ajuste que anticipó el presidente electo y cómo el desfinanciamiento puede afectar a cada municipio. En ese sentido, resonó la frase “va a ser un año difícil” en los pasillos del espacio platense, sumado a la necesidad de mantener la unidad entre los dirigentes de Unión por la Patria para reforzar sus próximas acciones y estrategias.

“Eliminar la obra pública nos preocupa porque tenemos muchos proyectos en marcha, que no se pueden cortar y esa preocupación también la comparte el gobernador, porque sabe perfectamente que todos los intendentes tenemos obras públicas de la Nación. Así que eso es una preocupación de todos y nosotros lo que hemos manifestado es que ya comenzamos con ajustes para poder apaciguar lo que se viene", aseguró el intendente de Coronel Suárez, Ricardo Moccero.

En esa misma línea, el intendente electo del partido de La Costa, Juan de Jesús, expresó: "Nos reunimos para tener una idea de cómo está la provincia, cuáles son las necesidades de aquí en adelante, mancomunar la política, mancomunar la gestión, además de reconocer el triunfo que ha tenido el gobernador y tratar de encontrar un punto común en el cual la República Argentina pueda seguir creciendo, desarrollando el trabajo con las provincias y los municipios" y señaló: "Habrá dificultades que hay que tratar de sortearlas, con diálogo y entendiendo y viendo cómo son las cuestiones y la identidad de cada provincia".

Por otro lado, el alcalde de Ensenada, Mario Secco, afirmó que uno de los motivos de la reunión fue analizar cómo el gobernador lleva los problemas de los jefes comunales. “Muy conforme porque los 84 intendentes estamos en columna más atrás del gobernador y muy conforme porque todos entienden la unidad. Él (Kicillof) es quien nos tiene que conducir”, sintetizó.

Con este panorama, Kicillof convocó a los mandatarios locales a seguir trabajando en la transformación de los distritos "como se hizo durante estos cuatro años, dando las respuestas que las y los bonaerenses esperan".