Desde la llegada de Javier Milei a la presidencia de la Nación, los gobernadores pusieron en marcha una vía de comunicación rápida y activa: un grupo de WhatsApp. Allí, dijeron “presente” todos y cada uno de los mandatarios y el jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

En lo que resulta ser el primer espacio donde conviven todos los referentes, los celulares son testigos de los mensajes que llegan para mantener mayor organización entre sí, intercambiar las inquietudes y blindarse sobre conflictos tales como la negociación por el Impuesto PAÍS o la distribución de los recursos coparticipables.

En ese sentido, según trascendió en La Tecla, el que logró un rol fundamental fue el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien tomó el timón del barco y presionó sobre los temas que más inquietan al territorio bonaerense: desde el financiamiento para poner en marcha al sector productivo, hasta la preocupación por los aumentos del Transporte público y los servicios.

Por lo tanto, el mandatario bonaerense propuso medidas para trabajar en conjunto contra este impacto, pero resultó más difícil llegar a un acuerdo con el resto de sus pares.

Asimismo, otros referentes que se mantienen activos son el mandamás de Chubut, Ignacio Torres; de Santa Fe, Maximiliano Pullaro; de Formosa, Gildo Insfrán; y de Entre Ríos, Rogelio Frigerio.

Por su parte, los principales temas en los que llegaron a coincidir radicaron en el rechazo a la modificación de la Ley de Pesca, donde los mandatarios alzaron la voz y lograron que ese punto de marcha atrás al interior de la Ley de Bases. Además, resonó la preocupación por el abandono de la obra pública por parte de Nación y la necesidad de retomar ese pilar de trabajo.

Mientras tanto, los mandatarios observan y actúan frente al escándalo que se gestó en el Congreso, producto del retroceso de las reformas que pretende el presidente. Así, mantienen los pelos de punta sobre las futuras negociaciones para salvaguardar sus territorios.