Después del encuentro del Partido Justicialista este viernes, diferentes dirigentes de la provincia de Buenos Aires proyectaron su visión sobre el futuro político y desmenuzaron la discusión por la conducción.

Por su parte, en la cumbre aprobaron el pedido de licencia de Alberto Fernández, y decidieron llevar a cabo una mesa de trabajo para convocar a todas las personas que quieran formar parte del espacio.

Sin embargo, esto produjo opiniones dispares al interior del Partido, en especial en el territorio bonaerense. Así, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, fue una de las primeras en arremeter al respecto en diálogo con La Tecla: “Los que vienen a buscar aplausos, y no reflexión, no pueden hacer un aporte serio al colectivo”.

Asimismo, Mendoza no dejó pasar las internas que existen al interior del PJ y salió en defensa de Máximo Kirchner: “Hemos escuchado a algunos de los congresales que han planteado que la provincia de Buenos Aires no tenía una buena conducción o que no se podía delegar (…) Máximo fue un presidente que no se le impuso a nadie. Al contrario, yo soy testigo de diferentes reuniones donde intendentes de toda la provincia han pedido que asuma esa responsabilidad”.

Por otro lado, el senador bonaerense Sergio Berni aseveró que el peronismo tiene “mucho miedo de ir a una interna” pero que, sin dudas, lo necesita; y catalogó de “papelón” hacer un encuentro para aprobar la licencia de Alberto. “Una interna rápida abierta, que todos los compañeros con vocación de poder y transformar tengan participación y no pasar este papelón”, dijo a La Tecla.

A contramarea, la alcaldesa de Moreno, Mariel Fernández, pidió nuevas autoridades de la manera más “armoniosa” posible. “Es importante tratar de que podamos tener nuevas autoridades, o aunque sea una transición, y que eso sea de la manera más armoniosa posible. No es la discusión central porque hay muchos problemas en Argentina”, aseguró al respecto.