Recientemente el ministro de Economía de la Provincia de Buenos Aires, Pablo López, se reunió con los gremios estatales bonaerenses y fue sincero con el complejo panorama económico que les depara para los próximos meses.

Según trascendió, López aseguró a los gremios que el pago de salarios no está en peligro, pero les advirtió que la Provincia de Buenos Aires no podrá acompañar los aumentos si la idea es ir a la par del ritmo inflacionario, tal como venía sucediendo.

Cabe destacar que la recaudación provincial cayó un 20% por la recesión y que los recursos discrecionales que llegaban del Gobierno se cortaron. Acorde a lo trascendido por fuentes gremiales, se rumorea que podría estar en riesgo el pago de los aguinaldos de julio. En ese sentido, parece ser que los gremios pidieron que el gobierno provincial utilice todas las herramientas que tenga a disposición para encontrar soluciones permanentes, sobre todo ante la quita de los recursos nacionales.

Además, pidieron que Kicillof se encargue de judicializar el conflicto para recuperar los fondos eliminados por Milei y sugirieron la creación de impuestos a los sectores de mayor poder adquisitivo, como el campo.

Ahora la incógnita se presenta en tratar de prever las medidas que puedan tomar los gremios ante la situación, que será cada vez más complicada y puede poner en tensión la relación de Kicillof con los líderes de los sindicatos.