Esta semana el expresidente Mauricio Macri se expresó respecto de la actual situación política del PRO y la posible conformación de una alianza con el oficialismo nacional para las próximas elecciones legislativas nacionales de octubre. En ese marco, opinó que La Libertad Avanza (LLA) busca una “posición dominante”, mientras que su espacio mantiene la intención de “ayudarlos a gobernar”.

De esta manera, Macri habló sobre una reunión que mantuvo con los principales dirigentes de su espacio, donde se conversó sobre la situación del país, las dificultades que atraviesan los ciudadanos y la organización de la estrategia electoral. En ese sentido, aseguró que el principal obstáculo para avanzar en la alianza es la imposibilidad de encontrar “un lugar de comodidad” entre ambos espacios.

Respecto a la posibilidad de que LLA busque quedarse con los principales lugares en las listas y darle al PRO a un rol secundario, Macri no le escapó a la polémica: “Eso es una confirmación que está fuera de discusión porque el oficialismo quiere tomar una posición totalmente dominante”.

En ese marco, el dirigente amarillo aseguró que, desde hace casi dos años, su fuerza política intenta aportar a la gobernabilidad del país, pero que los resultados no estuvieron a la altura de las expectativas: “La prioridad desde hace casi 2 años, ha sido siempre intentar ayudarlos a generar gobernabilidad. Lamentablemente, no ha sido lo que la Argentina necesitaba, por eso seguimos con este nivel de riesgo país y con problemas para que vuelva a crecer”.

A su vez, Macri subrayó la preocupación del PRO por lograr un crecimiento económico para todos argentinos y aseguró que seguirán “debatiendo todo lo necesario” para definir una postura definitiva. “A todos les preocupa que el país vuelva a crecer a un ritmo donde se puedan a incluir a todos los ciudadanos”, sostuvo.

Cabe destacar que ambos partidos buscan definir una posible alianza electoral en medio de una innegable tensión, debido a que distintos sectores internos amenazan con frustrar cualquier acuerdo. En ese marco, la fecha límite para presentar las alianzas ante la Justicia es el próximo jueves, así que trabajan a contrarreloj.

Desde el lado amarillo, enfrentan dos decisiones clave: primero, terminar de definir si en la Ciudad también van a ir a la unidad con los libertarios como en la provincia de Buenos Aires; y segundo, si avanzan, el PRO deberá negociar los nombres que integrarán las listas.

En la otra esquina, desde el oficialismo nacional, ya fijaron las condiciones para la negociación y ofrecen entre dos y tres bancas de diputados a sus eventuales aliados, pero descartaron ceder candidaturas para el Senado, que tendría a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich como cabeza de lista.

Hay que destacar que en últimas semanas trascendió que el macrismo habría reactivado las negociaciones para reconstruir Juntos por el Cambio, junto a la Unión Cívica Radical (UCR), la Coalición Cívica y el socialismo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).

En medio de esto, diversas fuentes libertarias dejaron trascender la decisión de avanzar en soledad y descartaron un nuevo acuerdo con sus aliados políticos: “No va a haber acuerdo. La Libertad Avanza va a ir a las elecciones con lista violeta pura. Patricia Bullrich pica en punta para encabezar la lista de senadores y se va a definir en las próximas semanas el resto de los candidatos”. Esta declaración no sorprendió al PRO porteño y desde el armado de Jorge Macri activaron las conversaciones con referentes de la UCR, de Confianza Pública, la Coalición Cívica y del socialismo, espacio liderado por Roy Cortina.

En medio de todo esto, desde entorno de Mauricio Macri advierten que romper con el PRO implica poner en riesgo la gobernabilidad futura. “No es coherente que de un lado de la General Paz digan que está todo bien, y del otro, todo mal. No encontramos una explicación racional. El Gobierno necesita un bloque de Diputados robusto. Estar dividiendo a los que más los apoyaron son señales negativas”, concluyeron los amarillos.