

En la tarde del lunes las empleadas de "Cami Chic", una tienda de ropa femenina ubicada en la localidad de José León Suárez, padecieron unos minutos de terror durante un increíble asalto.
Todo comenzó cerca de las 15, cuando un joven de entre 20 y 25 años se presentó en el local ubicado sobre la Av. Márquez al 2600, y les solicitó algunas prendas.
"Me comentó que la ropa era para él y que la necesitaba para trabajar, también dijo que sentía vergüenza admitir que quería usar indumentaria femenina", recordó Kiara. "Eligió dos vestidos que se llevó al probador y cuando salió aseguró que no le habían entrado. También escogió un pantalón con brillos que le habría quedado grande", detalló la joven encargada.
Cualquier excusa es buena: un sujeto entró a una boutique y le pidió a las encargadas ropa para él y para trabajar. Eligió vestidos y pantalones hasta que reveló que se trataba de un robo. Las jóvenes lo enfrentaron y una logró escapar a la calle para pedir ayuda@sanmartingob pic.twitter.com/AmsFlGYYVo
— Buenos Aires Noticia (@buenosaires_n) October 9, 2025
A continuación el sujeto observó las prendas colgadas en un perchero y luego se dirigió a las vidrieras ante las atentas miradas de las vendedoras.
En ese momento una clienta que estaba embarazada y acompañada por una niña de corta edad, ingresó al salón y le pidió a Celeste que le muestre algunas remeras.
En el video que está incluido en la nota se observa que el sospechoso joven regresó e intentó cerrar la puerta corrediza que las mujeres mantenían abiertas. De inmediato Kiara se le acercó para impedir que las encierre y discutió con el sujeto que se metió una mano en el bolsillo y sacó lo que pareció un arma oculta en una bolsa.
El terror se apoderó de las mujeres: la clienta abrazó fuerte a la hija y Celeste las arrastró hasta el probador para protegerlas. Kiara corrió hasta el mostrador seguida por el malandra que mediante amenazas de muerte le robó la recaudación de la jornada.
"Intentó manotear mi teléfono y el del comercio, pero me los guardé en los bolsillos del pantalón y no se los pudo llevar", aseguró la joven. La compañera escondió el propio bajo la remera.
El sujeto pretendió robar a la clienta que permanecía en el cambiador y, con valentía, Celeste le cortó el paso para que no se acerque. En ese instante de confusión, Kiara se atrevió a correr hasta la puerta para ganar a la calle y pedir ayuda.
El sorprendido delincuente la persiguió para interceptarla pero, finalmente, no la pudo reducir y optó por abandonar el lugar.
"En el piso encontramos la bolsa que se sacó del bolsillo, estaba vacía y sospechamos que no tenía armas", indicó Kiara.
Hasta el momento el atrevido rastrero no habría sido identificado y permanece en libertad.