Este miércoles el gobierno de la Provincia de Buenos Aires formalizó el pedido de una reunión con el flamante ministro y dirigente del PRO, Diego Santilli, que enfrenta el desafío de tender puentes con las provincias, para facilitar la aprobación de las reformas impulsadas por el gobierno de Javier Milei en el Congreso.
El anuncio fue realizado por el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco. Según explicó, la solicitud fue ingresada esta mañana, apenas un día después de la asunción de Santilli. El objetivo de la provincia es "reclamar los fondos que el gobierno nacional le quitó a los bonaerenses y retomar la ejecución de las 1000 obras que dejaron abandonadas en la provincia de Buenos Aires", tal como confirmó Bianco.
El pedido de reunión se da en un contexto de fricción política. Si bien Santilli ya mantuvo encuentros informales con gobernadores (entre ellos Ignacio Torres, Raúl Jalil, Martín Llaryora y Marcelo Orrego), el diálogo con la provincia de Buenos Aires parece más complicado.
En el día de hoy solicité formalmente una reunión al Ministro @diegosantilli para reclamar los fondos que el gobierno nacional le quitó a los bonaerenses y retomar la ejecución de las 1000 obras que dejaron abandonadas en la provincia de Buenos Aires. pic.twitter.com/N9oq8lXpoN
— Carli Bianco (@Carli_Bianco) November 12, 2025
Por otro lado, hay que destacar que el presidente Milei ha sugerido que la gestión de Kicillof es "parte del problema", una postura que podría dificultar la voluntad de diálogo por parte del ministro del Interior.
Por su parte, el gobernador Kicillof anticipó su visión sobre la falta de convocatoria: "Milei sabe que este gobernador de la provincia de Buenos Aires no va a acompañar ninguna ley que vaya en contra de los derechos de nuestro pueblo", manifestó en un acto reciente en Florencio Varela.
En este sentido, la provincia de Buenos Aires busca abrir una vía de conversación directa con el Ejecutivo Nacional para atender sus demandas financieras y de infraestructura, marcando el inicio de una etapa clave en la relación entre el gobierno de Kicillof y el de Milei.