Alberto dio inicio a las Sesiones Ordinarias con críticas a la Corte y apoyo a Cristina

Con un clima tenso, poca militancia y una relación distante con Cristina Fernández de Kirchner, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, dio inicio al período 141° del Congreso de la Nación.

Desde la Cámara de Diputados de la Nación, el Presidente Alberto Fernández inauguró el año parlamentario con el tradicional discurso de Apertura de Sesiones. El Movimiento Evita, y varias organizaciones que responden al Jefe de Estado no marcharán para respaldarlo, similar a lo ocurrido ayer en el acto de Morón, donde no recibió ningún aplauso cuando lo presentaron.

El saludo con Cristina Fernández de Kirchner fue frío, distante y protocolar. Sin embargo, durante las primeras palabras del Presidente en la Cámara de Diputados, habló sobre el intento de Magnicidio a la Vicepresidenta y lo calificó como uno de los hechos más lamentables en los últimos 40 años de democracia.

También agradeció a Sergio Massa por dejar la presidencia de la Cámara Baja para pasar al Ministerio de Economía y valoró el "compromiso para sumarse a esa compleja tarea".

Sorprendió los cánticos en el recinto para la reelección de Alberto. Muchas bancas del recinto cantaron: "Para Alberto, la reelección", pero los gritos venían de la oposición, en clara alusión a la fuerte interna del Frente de Todos a la hora de dirimir las candidaturas para las elecciones 2023. También hubo homenajes a excombatientes de Malvinas y distintas reivindicaciones a los trabajadores de la salud y de la economía popular.

El momento más tenso de la jornada se vivió cuando Alberto habló de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Bajo la atenta mirada de Horacio Rossatti, el Presidente mencionó la persecución judicial contra la Vicepresidenta, el escándalo por la causa Lago Escondido, y las escuchas ilegales realizadas durante el gobierno de Mauricio Macri hacia opositores, periodistas, y hasta miembros de su propio partido. 

Allí hubo muchos silbidos por parte de los legisladores de Juntos por el Cambio, y una fuerte ovación de los representantes del Frente de Todos, en una clara muestra de la división que hay en este país, pese al discurso "antigrieta" de Horacio Rodríguez Larreta.

Otra parte fuerte de la jornada fue cuando Alberto criticó con firmeza al Corte Suprema de Justicia de la Nación. Allí el mandatario lamentó que "el Poder Judicial no cuente con la confianza pública".

"Mientras que muchas provincias necesitan realizar obras que permiten asegurar servicios tan esenciales como el agua potable para sus habitantes, la Corte Suprema de Justicia aseguró a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires recursos coparticipables que no le corresponden contrariando la ley de coparticipación vigente. Le quita dinero a los que más necesitan y destina esos mismos recursos a la ciudad más opulenta del país".