En los últimos días, el Presidente de la Nación Alberto Fernández comenzó a llamar uno por uno a los intendentes de su partido para que acepten llevar la boleta de Daniel Scioli en las primarias lo que sumó más tensión a su relación con el kirchnerismo.
El kirchnerismo advirtió a la Casa Rosada que si quiere resistir con un candidato en las PASO, deberá presentar candidatos propios en todas las categorías. En un principio, en el albertismo respondieron públicamente al desafío y sugirieron a Victoria Tolosa Paz para enfrentarse contra Axel Kicillof en la Provincia de Buenos Aires.
No obstante, la falta de estructura propia retrotrajo al albertismo a la realidad ya que sin el respaldo de los intendentes será imposible tener competitividad contra el candidato que apoye Cristina Kirchner en las próximas elecciones. Por esta razón, el mandatario se puso en campaña para conseguir que los jefes municipales acepten la boleta en “V”, es decir, que vayan tanto en la boleta de Scioli como en la que presentarán el kirchnerismo y el massismo.
Según lo trascendido en los medios, en el encuentro que mantuvieron Máximo Kirchner y "Wado" de Pedro con intendentes en Quilmes, se deslizó la idea de evitar que Scioli y el resto de los candidatos albertistas pudieran llevar la boleta del gobernador y de los jefes municipales.
Si aceptan ese pedido, los intendentes dejarían abierta la posibilidad de tener rivales en las primarias, a las que les tienen terror por antecedentes como el sucedido con Raúl "El Vasco" Othacehé. El histórico intendente de Merlo era uno de los barones del Conurbano con mayor poder y perdió su bastión en unas PASO contra Gustavo Menéndez.
Sin embargo, los intendentes, si no hay una lista única, son partidarios de la boleta en “V” por lo que Alberto busca jugar con esa necesidad de acuerdo a lo informado por sectores allegados al Presidente.
Nueva fórmula
Interna al rojo vivo
Falta de consenso
Acto en Pilar
Armado de fórmula
Cierre de alianzas