La “madre de todas las batallas” sin dudas es la elección en la Provincia de Buenos Aires y el plan del kirchnerismo duro –según trascendió- es armar un repliegue táctico en el territorio bonaerense.
Para eso, a la cabeza del gobernador, Axel Kicillof y del titular del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, Unión por la Patria estrenó otra mesa chica para organizar la campaña en la Provincia de Buenos Aires y contener a los heridos por el cierre de listas.
Según publicaron distintos medios periodísticos, la mesa se juntó anoche y esperan que lo haga con cierta periodicidad, como la mesa que se reunía todas las semanas en La Plata.
Además del Gobernador y del líder de La Cámpora, la mesa la integran dirigentes bonaerenses como Martín Insaurralde, Verónica Magario, Jorge Ferraresi, Gustavo Menéndez, Cristina Álvarez Rodríguez, Carlos Bianco y Gabriel Katopodis.
Los heridos del cierre de lista también tienen una silla en esta mesa. Eduardo "Wado" de Pedro, que era el candidato a presidente a falta de un día para la presentación de las listas; el ministro de Desarrollo bonaerense, Andrés Larroque, que quedó marginado de las listas; el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, a quien le metieron una competidora en la interna matancera y el intendente de Ensenada, Mario Secco, que tampoco pudo colar candidatos en la Tercera Sección Electoral.
Se espera que Sergio Massa ubique a alguien de su confianza en la silla número 14. Creen que podría enviar a Luis Andreotti, de San Fernando.
De cara al futuro
Camino a las PASO
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Las internas del PRO
Duras críticas
Siguen las heridas