Este lunes, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof dio inicio a la Apertura del 152° Período de Sesiones Ordinarias en la Legislatura bonaerense.
“Estos 90 días nos dejan una primera enseñanza y advertencia: el Presidente Milei no quiere achicar el Estado, quiere desintegrarlo. Y lo reconoce”, advirtió Axel Kicillof.
“Este objetivo que abraza Milei, llegar al gobierno para desintegrar el Estado, tropieza sin embargo con un primer y determinante obstáculo: la Constitución Nacional. El 30% de los votos que consiguió en la elección general, más su triunfo en un balotaje con los votos prestados de la tercera fuerza, de ninguna manera lo habilita a destruir el Estado Nacional. Por más que se crea portador de un mandato divino que lo envió a refundar el país, el artículo primero de nuestra Constitución, inspirada en las ideas de Alberdi, es taxativo: la Nación Argentina adopta para su gobierno la forma representativa republicana, federal, según la establece la presente Constitución”, completó.
En ese marco, el gobernador bonaerense agregó: “Argentina es republicana, así que Milei debe respetar, aunque no tenga mayorías, la división de poderes. No puede gobernar por decreto o DNU ni someter al Parlamento. Argentina adoptó un régimen representativo, así que Milei debe respetar a los diputados, a los gobernadores y a todas las autoridades elegidas por el pueblo. Argentina es federal, así que Milei debe respetar a las provincias y a sus pueblos, eso implica cumplir leyes y normas, y dejar de extorsionar a los gobernadores para que aprueben leyes que lastiman los intereses de sus provincias”.
“Juramos sobre la Constitución de la Provincia de Buenos Aires defenderla y hacerla cumplir. Eso haremos”, lanzó.
Sobre esa línea, Kicillof expresó: “El gobierno nacional no se dedica a repartir limosna ni recursos discrecionales a las provincias, sino que tiene la obligación de contribuir al sostenimiento de la salud, la educación, la seguridad, la infraestructura que necesita el pueblo argentino que, para su información, no vive en un modelo teórico, sino en el territorio de las provincias argentinas”.
“Hacerlo no es optativo, es lo que está obligado a hacer el gobierno nacional. En caso contrario, como ocurre hoy, el gobierno nacional está abandonando al pueblo, está desertando. También el presidente juró sobre la Constitución y tiene que respetarla”, resaltó el mandatario bonaerense.
“Disolver el Estado, es un objetivo explícito del anarcocapitalismo. Por más dificultades y problemas que haya, creer que todo funcionaría mejor si no hubiera Estado es una muestra ridícula de terraplanismo ideológico, conceptual y cultural”, concluyó.
“Después de someter al pueblo, a la democracia y al federalismo a una agresión tan inédita como salvaje, ahora se nos lanza una invitación que se parece más a una amenaza o una imposición que a un diálogo. Ofrece exactamente lo que dice rechazar como método de la política: aprueben las leyes y recibirán los recursos que ilegalmente se cortaron”, comentó Kicillof.
En ese sentido, destacó: “Nuestra respuesta es muy clara: cuenten con nosotros para 30 reuniones de trabajo, para encuentros destinados a solucionar problemas, incluso para debatir. Pero si se trata de encuentros para fotos y marketing… arranquen nomás si no llegamos. Que quede claro: estaremos en todos los ámbitos que sean necesarios para seguir reclamando con firmeza algunos puntos concretos con los que todas las fuerzas políticas y los 135 intendentes seguramente coincidirán”.
“Nuestro pacto es con el Pueblo, nuestro pacto es con la Patria y nunca lo vamos a traicionar”, aseguró Kicillof.
El anuncio de la Apertura
Repercusiones del anuncio
Cumbre productiva
Uno por uno
Palos a la herencia
Nuevo organismo
Hora de negociar