Después de los fuertes rumores sobre una posible ruptura entre Sergio Massa y Axel Kicillof, el líder del Frente Renovador decidió postergar la cumbre con su tropa para que no se interponga con el encuentro del Partido Justicialista.
Por su parte, ambas reuniones estaban pactadas para el 22 de marzo y, según trascendió en los medios, la toma de postura del tigrense fue interpretada como necesaria para evitar que sigan creciendo las expectativas sobre un conflicto al interior del peronismo.
En ese sentido, el encuentro renovador que tuvo lugar en Roque Pérez dejó un intento de tregua. “Algunos nos quieren llevar a una guerra que no es propia y para la que no tenemos ni dos balas. Hay que construir un frente contra un gobierno que está arrasando. No podemos meternos en cuestiones que parecen de un centro de estudiantes”, comentaron en los pasillos.
Sin embargo, las rispideces siguieron en aumento: esta semana, el gobierno de Kicillof dio un volantazo en la designación de su gabinete e incorporó a un hombre que no había sido el pactado con Massa.
Por lo tanto, el equipo bonaerense recibió en la Autopista de Buenos Aires S.A (AUBASA) a Juan Guillermo Sauro, el funcionario de confianza del ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis. Sin embargo, el gobernador había acordado con el massismo que Martín Marinucci iba a desembarcar como titular, pero el pacto no se cumplió.
Asimismo, fuentes cercanas aseguraron que la noticia cayó pesada al interior del massismo y que no lo dejaron pasar. Por lo pronto, no tuvo lugar la tregua oficial que tanto estaban esperando.
Bastón del mariscal
Hubo volatanzo
Suenan los teléfonos
En medio de chispoteos