Recientemente el vocero presidencial, Manuel Adorni, se expresó sobre la intención del Gobierno nacional de avanzar en una “sala de prensa de elite” en Casa Rosada. En ese sentido, los dichos resonaron hasta en la Legislatura bonaerense y la diputada de Evolución Radical, Belén Malaisi, fue la primera en salir a repudiar el avallasamiento a la “libertad de expresión” y la “censura” contra los periodistas.
“Presenté un proyecto de repudio a la intención de Adorni de restringir el acceso de periodistas en Casa Rosada”, difundió en sus redes sociales la diputada, y agregó: “Nos quieren seguir censurando porque no quieren que la comunicación sea pública”.
En las últimas horas, el funcionario anunció que el Gobierno evalúa implementar una resolución en la que buscará “excelencia” para “acreditar medios según su alcance, su audiencia, y además exigiendo determinadas características de periodistas, en término de experiencia, que tenga relación de dependencia con los medios”.
“Vemos con estupor como el vocero presidencial quiere conformar una `sala de prensa de elite` vulnerando no solo los principios básicos del periodismo sino desconociendo uno de los pilares fundamentales del sistema republicano como es el derecho a la información pública”, destacó la parlamentaria de San Andrés de Giles.
El avance gubernamental contra la libertad de prensa parece ahora buscar dar un paso más, institucionalizarse, ante el anuncio del vocero presidencial de querer restringir el acceso a la Casa Rosada y a la sala de conferencias a periodistas y medios. “Vamos a hacer una sala de prensa de elite”, aseguró Adorni.
En este sentido, la legisladora provincial advirtió: “El vocero no solo quiere digitar a los periodistas y medios acreditados, sino que también las preguntas que pudieran realizarle”. “Nuestra democracia no puede permanecer inmóvil frente a tamañas declaraciones desafortunadas que suponen un grave retroceso”, afirmó en el proyecto ingresado este miércoles por mesa de entradas de la Cámara de Diputados bonaerense.
Sin duda la idea de Adorni no es sorpresa, dado que el presidente Javier Milei no se cansó de atacar públicamente a medios y periodistas, calificándolos con adjetivaciones negativas por el solo hecho de no compartir ideas.
Ahora, al vaciamiento que se produce en el sistema de medios públicos, reduciéndolos a la mínima expresión, se le suma la idea de reducir la presencia de la prensa en Casa Rosada, otra muestra de la avanzada del oficialismo contra el periodismo. “Desde el sistema democrático debemos repudiar estas actitudes que solo conducen a provocar situaciones de violencia que no tienen nada que ver con la democracia”, agregó Malaisi.
“Ya la Cámara de Diputados bonaerense con un proyecto de mi autoría repudió los ataques y agresiones por parte de Milei y ahora Adorni con afirmaciones autoritarias quiere negar el derecho a la información pública”, concluyó Malaisi.
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