Milei recién aprobó la emergencia agraria en Provincia pedida hace un año: ya no hay sequía

Esta semana el Gobierno nacional del presidente Javier Milei, a través del Ministerio de Economía de la Nación a cargo de Luis “Toto” Caputo, avaló la emergencia agropecuaria en unos 50 distritos de la provincia de Buenos Aires. Pedido que fue solicitado por la administración del gobernador Axel Kicillof en noviembre del año pasado y nuevamente en enero de 2024.

Lo firmado por Caputo contiene dos declaraciones: una emergencia agropecuaria va desde el 1° de noviembre de 2023 y hasta el 31 de enero de 2024 y abarca a explotaciones agrícolas, forestales y frutihortícolas; la segunda va desde el 1° de noviembre de 2023 y hasta el 30 de abril de 2024, pero abarca a explotaciones ganaderas, tamberas y apícolas.

Ambos casos son por sequía y para los mismos cincuenta distritos: Bahía Blanca, Puán, Patagones, Junín, Bolívar, Tornquist, Carlos Casares, General Alvear, Magdalena, Nueve de Julio, General Viamonte, Rauch, Villarino, General Arenales, Tordillo, Saladillo, Suipacha, Carlos Tejedor, Trenque Lauquen, Alberti, General Villegas, Pila, San Andrés de Giles, General Belgrano, Adolfo Alsina, Coronel Rosales.

Además de Pergamino, Lobos, Bragado, Rivadavia, Chascomús, Saavedra, Lincoln, Azul, Chacabuco, Adolfo Gonzales Chaves, Chivilcoy, General Las Heras, San Antonio de Areco, Navarro, Monte, General Lavalle, Dolores, Tres Arroyos, Luján, Maipú, Veinticinco de Mayo, Rojas, Guaminí, Ramallo y General Madariaga.

Cabe destacar que desde el gobierno bonaerense venían reclamando estas declaraciones desde marzo y el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, denunció en un encuentro del Consejo Federal Agropecuario que había "700 productores cuyo expediente está planchado por la Nación, que pueden acceder a las exenciones impositivas provinciales, pero no a las nacionales".

La demora de Caputo fue tal que la sequía que motivó la emergencia agropecuaria ya no está desde el mes de agosto. El reporte de enero hablaba de falta de lluvias que llevaba 22 meses de duración. Además, se seguía registrando escasez de precipitaciones en más de 60 municipios bonaerenses.