Este martes el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se reunió en Villa Gesell con unos 38 intendentes bonaerenses para conversar sobre el momento político que atraviesa la Provincia y la estrategia de cara a las elecciones legislativas de este año.
Acorde a lo trascendido, en la reunión surgieron tres definiciones claves: en primera instancia, la voluntad de desdoblar y separar las elecciones definitivamente de la votación nacional; por otro lado, eliminar las elecciones primarias (PASO); y, por último, avanzar por la eliminación de los límites las reelecciones de intendentes, concejales y consejeros escolares.
Según comentaron fuentes cercanas a la reunión, la gran mayoría de los intendentes pide desdoblar, pero el gobernador les explicó que no se puede decidir hasta que no se sepa qué va a pasar con las PASO nacionales. A su vez, si bien se dieron los consensos en torno a estos tres temas, eso no significa que se puedan traducir en hechos, dado que algunos de esos temas se deben tratar en la Legislatura bonaerense.
Por otro lado, en la cumbre también se habló sobre la necesidad de la construcción de un frente político que rompa fronteras y sea anti Milei; el presupuesto y recursos; poner en valor la gestión; las obras y fondos para encarar respuestas para el año electoral; y la campaña que se viene para cuidar la provincia y los municipios.
Cabe destacar que desde Gobernación están pensando en construir una alternativa a Javier Milei a nivel nacional, pero la idea es hacerlo alejados de Cristina Kirchner y del camporismo. En ese marco, en la reunión se dejó saber la disconformidad del sector por tener un oficialismo tan diluido en el marco de las internas, sobre todo por la situación en la Legislatura.
Durante este año el Gobernador no logró que la Legislatura lo apoyo para crear la empresa estatal de medicamentos, ni tampoco la empresa de emergencias. A su vez, también quedó pendiente la Ley de Presupuesto para 2025, el Endeudamiento y la Ley Impositiva, además de la aprobación de 200 pliegos judiciales y el nombramiento de nuevos ministros en la Suprema Corte Bonaerense.
En ese marco, hay que destacar que los mandatarios bonaerenses dieron su respaldo al gobernador, algo que ni Daniel Scioli ni otros gobernadores anteriores lograron con tanta fuerza. Esto también se interpretó como una señal de respaldo a Kicillof como alternativa frente a Cristina Kirchner, de quien los intendentes parecen estar queriendo tomar distancia.
En la reunión participaron la vicegobernadora Verónica Magario; los ministros de Gobierno, Carlos Bianco; de Trabajo, Walter Correa; de Infraestructura y Servicios Públicos, Gabriel Katopodis; de Economía, Pablo López; de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque; de Seguridad, Javier Alonso; las ministras de Hábitat y Desarrollo Urbano, Silvina Batakis; y de Mujeres y Diversidad, Estela Díaz; la jefa de Asesores del Gobernador, Cristina Álvarez Rodríguez; y la secretaria general de la Gobernación, Agustina Vila.
También se contó con la presencia del director de Aguas Bonaerenses (ABSA), Jorge Paredi; y el subadministrador general de Vialidad provincial, Hernán Y Zurieta.
A su vez, se destacó que varios intendentes quisieron participar pero no pudieron, como el mandamás de Hipólito Yrigoyen, Ignacio Pugnaloni; el jefe comunal de Almirante Brown, Mariano Cascallares; el mandatario de Ituzaingó, Pablo Descalzo; la jefa comunal de Carlos Tejedor, María Celia Gianini; el intendente de Marcos Paz, Ricardo Curutchet; y el histórico de Berazategui, Juan José Mussi.
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