Durante el fin de semana el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, lanzó su nuevo espacio, el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), con el respaldo de intendentes, sindicatos y otras agrupaciones. En ese marco, como era de esperarse, las respuestas no tardaron en llegar y desde algunos sectores del peronismo plantearon su negativa.
Luego de que se lanzara el comunicado que presentó al espacio liderado por Kicillof para pelear en la próxima elección, al menos tres intendentes salieron a despegarse de la movida: el jefe comunal del Partido de la Costa, el histórico Juan De Jesús; su par de Almirante Brown, Mariano Cascallares, y el intendente de Pilar, Federico Achával.
Desde el Partido de La Costa aseguraron que fue “una sorpresa” que la firma del jefe comunal apareciera en el comunicado, e inmediatamente pidieron que lo “borren del listado” donde aparecen otros intendentes ligados al kicillofismo como Julio Alak (La Plata), Jorge Ferraresi (Avellaneda) o Mario Secco (Ensenada).
Por otro lado, en el caso de Cascallares, el intendente apareció en la primera versión del comunicado, pero su firma desapareció de una segunda versión y tampoco está en la web que lanzó el espacio. Todo esto, a pesar de que el jefe comunal se venía mostrando bastante cercano al gobernador.
Según trascendió desde el círculo cercano de Cristina Fernández de Kirchner, la titular del Partido Justicialista nacional, confirman que tampoco el intendente de Pilar, Achával, firmó el comunicado, salvo que este no habría pedido ser sacado de la nómina cuando el manifiesto se hizo público. En ese marco, tras el estreno del nuevo movimiento que tiene como referente principal a Kicillof, desde el kirchnerismo aseguran que “se quedó con la parte más chica” de Unión por la Patria y, a su vez, no encontraron ningún dirigente que ya no esté dentro del peronismo.
De esta manera, no sorprendió la incorporación del intendente de Esteban Etcheverría, Fernando Gray, o al diputado Florencio Randazzo, quienes están enemistados desde hace tiempo con Cristina Kirchner. En ese sentido, aseguraron que no suma a Sergio Massa, ni a Juan Grabois, por lo que no es nada nuevo, sino una escisión de Unión por la Patria que solo sirve para “dividir”.
A su vez, desde el kirchnerismo salieron a cuestionar que el lanzamiento del movimiento se diera en un momento donde el gobierno nacional está en el ojo de la tormenta por el escándalo $LIBRA, y calificaron de “amateur” que Kicillof saliera a dividir al peronismo en este momento donde tienen su mejor oportunidad.
Cabe destacar que desde el kicillofismo salieron a asegurar que no buscaban una disputa interna, pero que era necesario salir a contener de alguna manera a los actores que lo consideran al gobernador principal alternativa al gobierno de Milei. En ese marco, destacan que “es como tantos otros espacios dentro del peronismo, todo adentro", y que reivindican a Perón, Evita, Néstor y Cristina Kirchner pero convocan a "pensar en futuro”.
De esta manera, el gobernador Axel Kicillof y su nuevo movimiento salieron a plantar bandera en un peronismo apagado por la insistentes internas. Ahora, con el descontento de algunos jefes comunales, habrá que esperar el impacto en los bloques oficialistas de la Legislatura bonaerense.
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