Este lunes una madre de Villa Madero vivió un dramático momento cuando jóvenes ladrones que le sustrajeron el rodado, se daban a la fuga con el hijo menor sentado en los asientos traseros.
La mujer lo rescató luego que el hijo mayor enfrentó a uno de los delincuentes y con gritos desesperados pidió que lo dejen descender del automóvil.
El aterrador suceso comenzó cerca de las 20, cuando Carla salió de la casa para llevar a los chicos de 8 y 10 años a las prácticas de fútbol.
La madre y el mayor de los niños subieron al auto familiar que estaba estacionado sobre la calle Talcahuano y en el que ya los esperaba con el cinturón de seguridad puesto el menor de los hermanos.
Instantes después y antes que cierre las puertas del Chevrolet color negro, cuatro delincuentes que caminaban por la acera de enfrente cruzaron a la carrera y se abalanzaron sobre el rodado.
A continuación se produjo una aterradora lucha entre Carla y dos de los malvivientes que la tironeaban para que se aleje mientras que ella se resistía para que le permitan bajar a los niños del habitáculo.
En esa circunstancia se produjo una terrible confusión: cuando la mujer vio a uno de los chicos parado en la acera, pensó que habían bajado a los dos pero el menor permanecía en los asientos traseros y atrapado por el cinturón de seguridad.
Los gritos del nene de 10 años, que le pedía por el hermano a uno de los ladrones, alertaron a Carla que corrió detrás del Chevrolet y finalmente sacó al chico del auto.
Luego de chocar con un macetero de la acera de enfrente, los violentos sujetos escaparon en dirección a la Ciudad de Buenos Aires y algunas horas después el vehículo fue recuperado con severos daños, producto de otra colisión, en Villa Lugano.
La Policía de la Ciudad le confirmó a la familia que había un sospechoso detenido y que se realizaban diversas tareas para confirmar o descartar su participación en el atraco.
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