Un sujeto lo tomó del cuello para robarle y perdió el control del colectivo que chocó con una garita

En la tarde del domingo un violento intento de robo no acabó en tragedia de forma milagrosa. Un chofer de la Línea 216 que recorría la localidad de Castelar, en el partido de Morón, perdió el control de la unidad cuando un ladrón lo atacó por la espalda para robarle el teléfono celular.

Por buena fortuna el colectivo sin control circulaba a baja velocidad y cuando subió a la vereda no había transeúntes pasando por el lugar.

El increíble suceso ocurrió alrededor de las 16 cuando el interno 276 con dos pasajeros transitaba por la calle Madrid. Pocos metros antes de llegar y girar en la intersección con Sánchez, uno de los sujetos se acercó al conductor, lo tomó del cuello y le exigió que le entregue el dispositivo.

El trabajador fue sorprendido cuando pretendía doblar y sin acabar la maniobra siguió derecho hacia la vereda e impactó con el refugio de una parada de colectivos.

Asustados por las colisión, el ladrón y el cómplice abandonaron la unidad a la carrera y escaparon por la calle Madrid con rumbo desconocido.

Por buena fortuna en la destrozada parada de colectivos no permanecían pasajeros y el chofer, identificado como W.O., no sufrió heridas de consideración.